La nacionalidad al servicio de la solidaridad
Avelino Stanley/Hoy La nacionalidad es la condición social más sagrada que tiene un ser humano. La dominicanidad es el sentimiento más firme de amor por nuestra tierra. “Vivir sin patria, dijo Duarte, es lo mismo que vivir sin honor.” El destino de la nacionalidad de un país tiene que ser decidido por todos los connacionales. Esta condición jamás debe ser interpretada de manera unilateral, en un cuarto frío, como lo han hecho los integrantes del Tribunal Constitucional de la República Dominicana. A finales del siglo XIX, cuando la endeble economía dominicana estuvo a punto de naufragar, fue preciso acudir a inmigrantes. Desde entonces comenzaron a entrar al país “extranjeros en situación migratoria irregular”. En esos momentos el estatus de la nacionalidad de ellos no importaba. Lo que se necesitaba era su fuerza de trabajo . Cuando avanzó el siglo XX en la tierra de Luperón había gente de todas las latitudes. De las Antillas inglesas trajeron ...